Este ángel tallado a mano en sal del Himalaya blanca no es solo un objeto decorativo: es un guardián energético. Representa la protección divina, la pureza del alma y la conexión con lo sagrado. Su presencia irradia paz, ayudando a limpiar el ambiente de energías densas y fomentando la calma interior.
La sal del Himalaya blanca es menos común que la rosada y tiene una vibración aún más sutil. Se asocia con la purificación del aura y la eliminación de energías negativas acumuladas. Colocar este ángel en espacios clave (entrada, dormitorio, lugar de meditación o altar) potencia la armonía del entorno y favorece la conexión con planos superiores.
🕯️ Ideal para:
Altares personales o espacios sagrados
Protección espiritual del hogar
Regalo con intención espiritual y simbólica
Decoración consciente y con alma
🌿 Propiedades espirituales y terapéuticas:
Limpieza energética del entorno
Protección contra cargas electromagnéticas y psíquicas
Facilita la meditación y el descanso profundo
Promueve la sensación de paz y conexión interior
Cuidados: Al estar hecho de sal natural, no debe mojarse ni estar en ambientes muy húmedos. Manipular con cuidado para preservar su forma.
Nota: Cada pieza es única en forma y tono, tallada artesanalmente con amor. Puede presentar pequeñas vetas o cristalizaciones propias de la sal natural.