Radiante, cálida y vibrante, la drusa de citrino es una auténtica joya de la naturaleza que irradia energía solar y positiva allá donde se coloque. Con sus cristales dorados y estructura luminosa, no solo embellece cualquier espacio, sino que activa la vibración de la abundancia, la alegría y la autoestima.
El citrino es conocido como el “cristal de la prosperidad”. Ayuda a atraer éxito, claridad mental y motivación, favoreciendo decisiones firmes y objetivos claros. A nivel emocional, eleva el estado de ánimo, reduce la ansiedad y potencia la confianza en uno mismo.
En su forma de drusa, la energía del citrino se amplifica y se proyecta de forma constante en todas direcciones, siendo ideal para armonizar espacios de trabajo, negocios, estudios o cualquier lugar donde se necesite dinamismo, concentración y protección frente a energías negativas.
Perfecta para emprendedores, personas creativas, estudiantes o quienes buscan transformar su energía vital y tomar impulso en nuevos comienzos. La luz que proyecta esta piedra no es solo visual: es una llamada al despertar interior.
8-10 cm. aprox.