El aragonito en bruto es una de esas piedras que no busca llamar la atención, pero que llega justo cuando más necesitas parar, respirar y volver a ti. Su energía es cálida, reconfortante y profundamente estabilizadora.
Es ideal si sientes que estás desconectada de tu cuerpo, si vas a mil por hora o si simplemente te cuesta bajar de la mente al presente. El aragonito ayuda a enraizarte, a calmar los nervios y a soltar tensiones físicas y mentales acumuladas. Es una piedra muy usada para la ansiedad, el insomnio y el agotamiento emocional.
En su forma bruta, conserva toda su fuerza mineral original. Muchos la colocan bajo la almohada, sobre el plexo solar o en un rincón de descanso para crear un ambiente más sereno. También es muy útil para quienes practican yoga, Reiki o trabajos energéticos centrados en el cuerpo.
La recomiendo especialmente si necesitas volver a sentirte segura en ti misma, cuidar tu descanso o simplemente tener cerca algo que te recuerde que todo está bien, aquí y ahora.
2-3 cm.