La amatista pulida es mucho más que un cristal bonito: es un amuleto de serenidad, claridad y protección que puedes llevar contigo o colocar en tus espacios sagrados. Al haber sido suavemente pulida, mantiene su poder energético natural pero con una textura más suave, perfecta para la piel, el tacto o la meditación en la palma de la mano.
Conectada al chakra corona y al tercer ojo, la amatista favorece la introspección, disipa la ansiedad y ayuda a calmar la mente en momentos de estrés o bloqueo emocional. Es una piedra ideal para equilibrar emociones, profundizar en prácticas espirituales y conciliar el sueño reparador.
Su tamaño manejable la convierte en la compañera perfecta para llevar en el bolso, bajo la almohada o en tu altar personal. Puedes utilizarla durante la meditación, en terapias energéticas o simplemente como recordatorio de tu fuerza interior y tu intuición.
Especialmente indicada para personas sensibles, creativas, meditadoras o quienes buscan un refugio de paz en medio del caos diario. Sutil, luminosa y profundamente reconfortante… porque tu calma también merece un lugar físico.
2-3 cm.